Llamamiento público al 7 de mayo.
La sociedad mexicana se encuentra atrapada en una guerra que no fue decidida por sus ciudadanos. Es una guerra que responde a intereses ilegítimos de quienes ocupan el gobierno, y que no ha hecho nada sino degradar las relaciones sociales en nuestro país, de muchas maneras y en muchos niveles.
Son conocidas las consecuencias de dicha guerra: más de 40 000 muertos, orfandad de más de 10 000 niños, desplazamientos de comunidades enteras, desestructuración de las economías locales, impunidad, desapariciones, repetidas escenas de terror y una ruptura total del estado de derecho, entre muchas otras.
Pensamos que la única manera de revertir esta situación es generar iniciativas que propicien la articulación de la sociedad, desde la sociedad misma. Que se auto organice en ejercicio de sus derechos, y se constituya como actor de cambio, en sentido democrático y libertario. Esta es la convicción que nos empuja a impulsar la iniciativa “Paremos las balas, pintemos las fuentes”.
Se trata de una propuesta realizada, inicialmente, por un grupo de artistas visuales, que hoy está conformada por artistas de diversas disciplinas, promotores culturales, activistas sociales y ciudadanos que, organizados en grupos o individualmente, nos relacionamos de manera horizontal para participar, cada quien desde sus aportes específicos, en colaboración con quienes se sumen a la iniciativa.
El principal eje de la iniciativa es fortalecer la convocatoria a la marcha nacional del 8 de mayo, hecha por Javier Sicilia, manifestándonos en contra de la violencia y de la impunidad, mediante una actividad pacífica que de manera visual explicite el ánimo nacional y llame la atención hacia la grave situación que estamos viviendo. Recurrimos a pintar las fuentes para dibujar con manantiales de sangre la descomposición ética y moral que funda la criminalidad con la política de nuestro país. Lo hacemos, también para reivindicar el espacio publico y encontrarnos con la ciudadanía enfatizando al arte como una de las muchas formas mediante las cuales se puede encausar la solución al problema de la violencia
El llamado de Sicilia ha sido un importante catalizador para la movilización de muchas y muchos. Nos sumamos a él con la firme convicción de que su convocatoria debe apuntalarse con las propuestas de todos los sectores de la sociedad, así como con la conformación de estrategias amplias e incluyentes que, respetando las diferencias, marque distancia de quienes desde los Partidos y las instituciones han priorizado sus ambiciones por el poder, profundizando aun más las dimensiones catastróficas de esta guerra.
Nos reconocemos como una pequeña iniciativa dentro de todas las que han surgido con estos mismos objetivos, y aspiramos a vincularnos con todas ellas. Aspiramos también a que el actor colectivo que se vaya conformando para luchar en contra de la violencia y la impunidad, incluya a las fuerzas sociales que permanecen movilizadas a lo largo y ancho del país, en defensa de sus derechos: a quienes luchan contra los megaproyectos y defienden sus culturas, sus territorios y sus recursos naturales; a las comunidades zapatistas que ejercen y construyen su autonomía; a quienes defienden su empleo contra salvajes despojos privatizadores; a quienes se enfrentan a la imposibilidad de mantener una vida digna, debido a tarifas de servicios básicos que se lo impiden; a quienes luchan por la libertad de los presos políticos y contra la impunidad en los casos de desapariciones forzadas; a quienes se solidarizan con los migrantes centroamericano y por supuesto, que incluya a todos los ciudadanos sin organización que luchan día a día por mantener una vida digna, en medio de un sistema que impone la corrupción, la avaricia, la desigualdad, la falta de democracia y la pérdida de derechos en todos los ámbitos.
La lucha contra el crimen organizado y la reconstrucción del pacto social requieren desarticular visiones militaristas que violan la soberanía nacional y popular, la garantía de cumplimiento a los Derechos Humanos, la despenalización del consumo de la marihuana, la solución estructural a las causas de la desigualdad y la injusticia. Resulta indispensable acudir a los valores de solidaridad, democracia, dignidad e igualdad, más arraigados en la ética de nuestros pueblos.
Con base en estas someras ideas, el 7 de mayo pintaremos de rojos diversas fuentes de la Ciudad de México y realizaremos actividades de difusión tanto de la situación que vive el país como de la marcha del 8 de mayo. Pintaremos las fuentes con pintura vegetal biodegradable y no dañaremos de ninguna manera las estructuras de las fuentes. Será, insistimos, una acción pública, pacífica y abierta, que apela a la creatividad para ejercer el derecho a la libre manifestación de las ideas.
Convocamos a todas y a todos, en el DF y en los estados de la Republica, a sumarse a esta iniciativa para manifestarse en contra de “la violencia de todo tipo que se ha apoderado del país, frente a esta guerra mal planteada, mal hecha y mal dirigida, que lo único que ha logrado, además de sumirnos en el horror y el crimen, es poner al descubierto el pudrimiento que está en el corazón de nuestras instituciones, frente a toda esta locura que tiene desgarrado el tejido y el suelo de nuestro país” (Javier Sicilia, 13 de mayo”)
Atte.
“Iniciativa Paremos las balas pintemos las fuentes”
Paremos las balas, pintemos las fuentes
Acción y solidaridad desde Argentina: Pintando fuentes
